Para Ángel Martín
Ya hace algún tiempo que dios
lo multó y lo expulsó del paraíso.
Ángel mordaz, irreverente y drogadicto,
insumiso, candente y peleón.
Dice el culto de estribor y bacinilla
que tiene todo el infierno a su favor,
que es mal trozo de pan y, entre comillas,
persiguiendo su muerte, un vividor.
Y se toma las copas con dios
cuando ni dios le habla.
Que esta ronda la pago yo,
con lo mal que tú andas.
Y me jura que es gran aprendiz
de la vida que falta,
porque sigue jugando a vivir
cuando el resto se cansa.
Cuando todos buscaban su ángel yo me lo encontré
rematando un Havana con cola en el bar de Miguel.
Para milagros se me ha hecho tarde, pero siéntate,
que a estas horas el cielo no abre y el infierno lo he echado a perder.
Don Quijote febril y soñador
enfrentado a los molinos del respeto,
siempre cuenta que el virgo lo perdió
en un lance mortal jugando al teto.
Arrogante a rabiar, voraz ladrón
de los trapos que ocultan los capullos.
Altanero, sagaz e inquisidor
de lo nuestro, de lo mío y de lo suyo.
Ángel dispara misiles skud
contra la vida necia y el necio farsante.
Si se calla, es que piensa lo mismo que tú,
si no habla, pues eso, lo mismo que antes.
Ángel terco, tahúr, contador,
Ángel fruto de cien mil caídas.
Ángel libre, olvidado por dios,
Ángel tripas para vivir la vida.
Ángel canto, espanto, corazón,
Ángel negro camino sin salida.
Ángel salto del tigre sin condón,
Ángel triste, cansado de mentiras.
martes, 13 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario